Ella baila. Desnuda su cuerpo ante las fogosas miradas de quienes ya no tienen pasión. Baila en medio del fuego y, al acabar su triste danza, regresa al oscuro cuartucho donde guarda bajo llave sus ilusiones perdidas.
Siempre digo que no hay nada perdido, por muchos candados que le pongamos. Quizá un día se queme en la pasión y las ilusiones vuelvan a inundarla y las rejas se deshagan en el fuego del entendimiento.
Y al girar la llave… un alo de luz intensa se enciende y al abrir… los recuerdos la inundan y acunándola la duermen, para que sueñe con risas y sus lágrimas callen.
Ella se levanta y se coloca la máscara, con ella puesta, baila sin alegría. Al quitarsela, a solas,la decepción en ella hace estragos. Ojalá encuentre un rayito de ilusión en algún lugar inexplorado.
Siempre digo que no hay nada perdido, por muchos candados que le pongamos. Quizá un día se queme en la pasión y las ilusiones vuelvan a inundarla y las rejas se deshagan en el fuego del entendimiento.
ResponderEliminarUn besito, ami
Y al girar la llave… un alo de luz intensa se enciende y al abrir… los recuerdos la inundan y acunándola la duermen, para que sueñe con risas y sus lágrimas callen.
ResponderEliminarLa habitación de los sueños rotos reside en nuestro interior, suele durar hasta que encuentras el interruptor, luego se desvanece
ResponderEliminaro bailar es retemperador
ResponderEliminarbesitos de portugal
y las ilusiones perdidas cubiertas por el fuego, se quiebran poco a poco...
ResponderEliminarBello retrato.
Un saludo
Ella se levanta y se coloca la máscara, con ella puesta, baila sin alegría. Al quitarsela, a solas,la decepción en ella hace estragos. Ojalá encuentre un rayito de ilusión en algún lugar inexplorado.
ResponderEliminarBesos
El trsite cuento de la chica bailaba y hacía contorsiones en la barra...
ResponderEliminarTras tan aparente frialdad pintada de ardiente pasión, un corazón ilusionado y ardiente espera...
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